La importancia de una silla ergonómica para una persona que pasa más de 5 horas sentado, es más importante de lo que te imaginas. Hoy hablaremos de lo importante que resulta ser la incorporación de una buena silla para nuestro día a día.
MUCHO MÁS QUE COMODIDAD
La mayoría de las veces en que se destacan las características ergonómicas de una silla pensamos que es simplemente Marketing o una característica más de poco revuelo. Nada que no conozcamos.
Es cierto que el elemento confort es indisociable de las sillas ergonómicas, pero precisamente alcanzan dicho grado de confort debido a los ajustes y regulaciones que tienen. Dichos ajustes lo que realmente hacen es que la silla se conviertan en una parte más de nuestro cuerpo, pudiendo esta adaptarse al usuario y no él a la silla. Esto se traduce en que estamos consiguiendo una óptima postura corporal, algo imprescindible para evitar lesiones y la fatiga.
Por lo tanto, estamos hablando directamente de salud, ya que los efectos nocivos de una postura incorrecta mantenida en el tiempo son mucho más grandes de lo que imaginamos.
UNA SILLA ERGONÓMICA PARA NUESTRO
TRABAJO AUMENTA LA PRODUCTIVIDAD

La productividad laboral aumenta con el uso de una silla de oficina ergonómica, ¿La razón? Trabajar en la postura correcta supone una mayor comodidad, esta se convierte en energía y motivación.
“El tema de las horas de trabajo presenta el eterno debate a nivel de productividad laboral: cantidad vs calidad. Muchas veces se considera que entre más horas de trabajo, mayor productividad se realizará.
LAS SILLAS DE TRABAJO ERGONÓMICAS CUIDAN DE NUESTRA SALUD

Una buena silla ergonómica será la solución a todos esas molestias y dolores lumbares. Disfruta tus horas y alcanza tus objetivos, cuidando de tu salud y mejorando tu espacio de trabajo.